Por R.A. Ohrenstein En el Talmud, existen tres niveles de riesgos, partiendo desde lo más simple hacia lo complejo: (1) un riesgo estándar o simple; (2) un riesgo especulativo; (3) un riesgo que encierra peligro. Podemos comparar la naturaleza de las actividades de negocios al desarrollo de un juego. Pero a diferencia de un "juego de apuestas" que es descrito como un juego de suma cero, en el cual la pérdida de una persona es la ganancia de otra, nos concentraremos en los juegos de "suma positiva", en el cual ambos participantes esperan utilidades de una determinada transacción de negocios. El próximo nivel de riesgos se mueven entorno a una transacción especulativa. El negocio consiste en una inversión en la cual el empresario apuesta a la posibilidad de un alza en el precio de mercado del commodity en cuestión. En este juego de inversión, la táctica de "apostar a ambas posibilidades" es empleada para mitigar la extensión del riesgo. La pregunta presentada a los sabios en debate se refiere a si este subterfugio táctico está más cerca de las utilidades que de terminar en pérdidas. El tercer nivel de los riesgos es, tal vez, el más interesante por su relevancia moderna. El tema es presentado dentro del marco del contrato de la Ketubah, pero esto provee la oportunidad para un análisis económico de gran alcance del riesgo y otros tópicos relacionados. Mientras que la Ketubah puede ser usado a modo de una inversión en un valor similar a los "futuros" de nuestros tiempos modernos, es un instrumento altamente especulativo. |
