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Desde mi perspectiva, el judaísmo es una síntesis de ambos elementos. El judío que es solo ritualista camina con un pie, el judío que es solo buena persona camina con un pie. Esta semana la Tora nos hace una invitación a evaluar cómo estamos caminando nosotros. Este equilibro queda de manifiesto en la primera letra de nuestra parashá: Y. El gran exegeta judío Rashí interpreta que esta letra da comienzo a nuestra parasha porque une ambos elementos de nuestra tradición. Es sorprendente como en el judaísmo una letra guarda un gran mensaje. Aunque esto no es tan extraño para nosotros en el siglo XXI. Si quieres mandar un e-mail y te equivocas en una sola letra o en un solo punto, ese mensaje jamás llegará a su destino. Esta parashá nos invita a escribir nuestro e-mail con la letra Y para que nuestro mensaje llegue al inbox del de D´s y de esta forma podamos unir ambos componentes del pueblo judío - ritual y moralidad - viviendo vidas profundas y con sentido.
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