
Parashat Vayerá
Las tres personas que vio Abraham
Con el correr de los años, se desarrolló una hermosa costumbre en el pueblo
judío. Muchas familias anotan en la tapa de sus libros fechas, nombres,
versículos que han sido importantes en sus vidas. En muchas Hagadot de Pesaj,
por ejemplo, encontramos fechas con los nombres de las personas que han
compartido el Seder durante ese año. En la portada de Sidurim encontramos fechas
de nacimientos, brit mila, casamientos o fallecimientos que acontecieron dentro
de la familia. En la primera página de muchos Majzorim se inscriben fechas y
nombres que han compartido cenas de Rosh Hashana o el corte del ayuno de Iom
Kipur. Esta semana quisiera contarles algo muy personal. Tengo un Tanaj que
recibí de regalo hace 20 años cuando estudiaba en el Instituto Hebreo. Durante
años su tapa estuvo vacía, hasta que escuché una enseñanza que escribí en su
primera página. Esta enseñanza se basa en los psukim que abren parashat Vayerá.
El primer pasuk de nuestra parasha dice: “Se le apareció a él (a Abraham) Adonai
en el encinar de Mamré”. Y a renglón seguido, el segundo pasuk dice: “(Abraham)
alzó sus ojos, y vio, y he aquí que tres hombres estaban parados junto a él”. Al
comienzo de esta parasha D´s se le aparece a Abraham, pero fíjense como lo hace.
Cuando nuestro patriarca levanta la vista y mira, no ve a D´s, sino que ve tres
personas que se le acercan. Hashem se le reveló a nuestro patriarca, pero lo
hizo a través de tres seres humanos que lo visitaron.
Cuando escuché por primera vez esta enseñanza, que se le atribuye al filósofo
judío Franz Rosenzweig, recuerdo que me llamó mucho la atención. Me llamó la
atención porque pensé inmediatamente en el mundo materialista, concreto,
empírico en el cual vivimos. Un mundo donde muchas veces nos cuesta encontrar la
presencia de D´s. Pero estos psukim me dieron un acercamiento a una posible
solución. Creo que una de las formas principales a través de las cuales D´s se
revela en nuestro mundo es a través de los seres humanos. Cada uno de nosotros
tiene en su interior una parte de D´s - una chispa divina - y cada vez que
actuamos con amor, con bondad, con misericordia, hacemos más tangible Su
presencia.
Para algunos D´s se revela en el mundo a través de la naturaleza, para otros D´s
se revela en la historia, para otros D´s simplemente no se revela. Para mí, D´s
se revela a través de nuestros actos. Por eso elegí estos versículos, y es por
eso que cada acción que realizamos en nuestra vida es de vital importancia. Cada
decisión puede inclinar la balanza, nos puede alejar o acercar a D´s. Sólo de
nosotros depende que camino tomar.
Shabat Shalom!
Rabino Marcelo Kormis.