Resumen de la Parashá Teztavé

 

B´´H

“Un recuerdo constante delante de D”S”

En nuestra Parasha D”s le dice a Moshé que reciba de los Hijos de Israel aceite de oliva puro para la “llama eterna” de la Menorá que Aarón deberá encender todos los días, “desde la tarde hasta la mañana”.

Además son descriptas las ropas sacerdotales que deberán ser vestidas por los Cohaním (sacerdotes) mientras realizan su servicio en el Santuario.

Todos los Cohaním vestían: 1) ketonet – una túnica larga de lino; 2) mijnasaim – pantalones de lino; 3) mitznefet– un turbante de lino; 4) avnet – un cinturón largo alrededor de las caderas.

Además, el Cohen Gadol (Sumo sacerdote) vestía: 5) efod – una especie de delantal hecho de lana teñida de colores azul, púrpura y rojo, lino e hilo de oro; 6) joshen – una placa que iba pegada al pecho, donde había incrustadas doce piedras preciosas grabadas con los nombres de las doce tribus de Israel; 7) meil – una túnica de lana azul con campanas y granadas de oro en su borde inferior; 8) tzitz – una placa de oro que se colocaba en la frente, con la inscripción “Santo para Di-s”.

Leemos en el capitulo 27, versiculo 12:

“Pon las dos piedras sobre las dos piezas de los hombros del efod como piedras de recuerdo para los hijos de Israel. Aarón llevará los nombres de ellos sobre sus dos hombros delante de Dios como recuerdo”.

Más adelante aparece esta mención en el capitulo 28, versiculo 29:

“Aarón llevará, de este modo, los nombres de los hijos de Israel sobre el Joshen por encima de su corazón cuando ingrese al santuario. Será un recuerdo constante delante de Dios”

¿Porque esta insistencia en que el Cohen lleve en sus ropas los nombres de los hijos de Israel?

¿Cuál es su significado tanto para el Cohen, como para el pueblo?

El Cohen ejercía su función como representante del pueblo de Israel .Era una función delegada que implicaba que cada uno de los actos de culto que hacia nunca eran para él solamente o para su grupo.

El hecho de ejercer una función tan importante podría traer peligros muy importantes y que la Parasha se encarga de mostrarnos.

En algún momento del ejercicio podría olvidar que es una función delegada y ejercerla para sí y para su grupo solamente.

El peligro de desligar sus actos de aquellos de quienes le delegaron sus funciones es el motivo que no solamente debe llevar el nombre de los hijos de Israel sobre el Efod. Sino que además los debe llevar siempre sobre el Joshen, cerca de su corazón, al ingreso al santuario.

La torah nos remarca que será un recuerdo constante delante de D”S.

Ninguna función es más importante que el pueblo y sus necesidades que deben ser el fundamento y el objetivo presente en cada uno de sus actos.

Nos sorprende y nos conmueve como nuestra Torah conoce al ser humano en su deseo de mirarse hacia el mismo, olvidando a quien sirve y porque esta allí.

Fundamentalmente nos habla de los dirigentes del pueblo de Israel que ni por un instante deben servirse a ellos mismos y olvidarse del pueblo.

A lo largo de nuestra historia como Pueblo de Israel hemos conocido dirigentes que hicieron honor a su cargo y fueron consecuentes y coherentes con su función.

En nuestro Estado de Israel hemos conocido dirigentes como Ben Gurion, Golda Meir, Itzjak Rabin y tantos otros que nunca antepusieron sus intereses personales o partidarios a los intereses del pueblo.

Este espejo debería ser donde nos miremos como sociedad y como naciones democráticas para evaluar y apreciar a nuestros dirigentes.

Lemos en el capitulo 29, versículos 42 y 43:

“Ésta será asimismo la ofrenda quemada continua para todas las generaciones. [Será ofrecida] delante de Dios en la entrada de la Tienda de Comunión, el lugar donde Yo entre en comunión con [todo el pueblo] hablando contigo allí .

  Es allí que entraré en comunión con los israelitas, y [el tabernáculo] será de este modo santificado con Mi gloria.”

Aparecen aquí los sacrificios que el pueblo de Israel debería hacer en la entrada del “Ohel Moed” (Tienda de comunión), en el cual se remarca nuevamente la comunión con todo el pueblo de Israel y no con unos pocos elegidos.

El aspecto comunitario del servicio a D”S es un hilo conductor a lo largo de cada uno de los momentos históricos de nuestro pueblo.

El ejemplo de la necesidad de un Minian mínimo de 10 personas para nuestras Tefilot que decretaron nuestros sabios ,nos muestra una vez más que somos seres humanos en comunidad y que en el encuentro de lo particular y distintivo de cada uno de nosotros en el conjunto, está el fundamento de la constitución como Pueblo de Israel .

Así se conjuga nuestra Parasha con la Parasha anterior (Truma).

Truma nos marca la necesidad de la contribución personal, única e intransferible y Tetzavè nos muestra que esa contribución se hace para formar parte de un conjunto de individuos con objetivos comunes y que los dirigentes deben entender siempre que están a su servicio.


Shabat Shalom U Mevoraj

Gustavo Kelmeszes
Rabino Círculo Israelita de Santiago